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EMAIL - CARTAS DEL LECTOR
: 22/9/2015
Carta de Lector
Francisco en Cuba:
bloqueo interno y reconciliación con los Lobos el diario no apoya ni contradice esta moción , depende del lector
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Francisco en Cuba: bloqueo interno y reconciliación con los Lobos
El dictador Raúl Castro, en sus palabras de bienvenida al pontífice Francisco, trazó de manera arrogante las reglas de juego para la visita papal, reafirmando delante del ilustre visitante el literal bloqueo interno en que los cubanos viven desde hace casi seis décadas. Antes que Francisco tuviese oportunidad de ofrecer su propuesta de “reconciliación” y “diálogo” para Cuba, el dictador Castro le recordó que la meta prioritaria del régimen continúa siendo la de “preservar el socialismo”; que la “libertad religiosa” ya sería un “derecho consagrado” en la Constitución; y que el régimen no admite interferencias, siquiera “indirectamente”, en lo que considera “asuntos internos” de la isla-cárcel (léase libertades y derechos humanos). El recado estaba trasmitido y las reglas de juego de ese brutal bloqueo interno castrista quedaron reafirmadas, no sólo ante el pontífice Francisco, sino también indirectamente ante el presidente Obama, que precisamente son sus grandes aliados en este momento, que están estaqueando en el plano internacional al régimen comunista, e impidiendo su derrumbe. Buena parte de los desdoblamientos de la visita papal cobra sentido y puede ser analizada del punto de vista de ese bloqueo impuesto por las reglas de juego del Lobo. El recado recibido de un oficial de la policía política por Martha Beatriz Roque, una destacada dirigente opositora que fue prohibida por el régimen de encontrarse con Francisco en el jardín de la Nunciatura, a donde había sido convidada, es suficientemente expresivo y habla por sí mismo: “Si usted tiene algo que decirle al papa, nos lo dice y nosotros se lo decimos”. También es expresivo y habla por sí mismo el comentario balbuceante del portavoz vaticano Federico Lombardi sobre la detención de disidentes en la conferencia de prensa posterior a la misa en Holguín, reproducido por el periodista Jesús Bastante, responsable de los asuntos religiosos en el ABC de Madrid, en artículo para la agencia española Religión Digital (21 de septiembre de 2015): “¿Por qué el Papa Francisco no ha criticado a la dictadura cubana? ¿Por qué no se ha encontrado con los disidentes de los Castro? El portavoz vaticano, Federico Lombardi, tuvo que echar mano de toda la diplomacia de la Santa Sede para responder a las insistentes preguntas de la prensa internacional durante la rueda de prensa posterior a la misa papal en Holguín. ‘No estaba ni está prevista una reunión, en sentido estricto’, con la disidencia, admitó el portavoz, quien sí reconoció que hubo un intento ‘fallido’ para que algunos disidentes pudieran saludar ‘de pasada’ al Papa. Algunos de ellos, como Martha Roque, fueron detenidos el sábado, cuando se dirigían a Nunciatura para saludar al Papa a su llegada y, posteriormente, participar en las vísperas de la catedral de La Habana. ¿Sabía Francisco que se habían producido estas detenciones? Lombardi no supo qué responder. ‘No tengo ninguna respuesta... de parte de la Santa Sede’, musitó el portavoz, quien tampoco quiso aclarar si el Papa se refería al régimen cuando pidió en la misa de Holguín a superar ‘nuestras resistencias al cambio’ ” (hasta aquí la versión textual del periodista español Jesús Bastante). Al mismo tiempo, decenas de opositores políticos fueron detenidos a la salida de sus domicilios y en las calles para evitar que con sus eventuales reclamos empañasen el clima de supuesta “libertad religiosa” que se viviría en la isla-cárcel de las Antillas. El Partido Comunista de Cuba (PCDC) exigió recibir las listas con los nombres de los fieles católicos que tuvieron que trasladarse en grupos a la Misa papal en La Habana. Y los obispos colaboracionistas consintieron. Más aún. Militantes comunistas viajaron en cada ómnibus con fieles católicos que se dirigían a la misa papal en La Habana. Y el PCC controló con sus militantes todo el trayecto de Francisco por las calles de La Habana. Algunos gestos, susurros y palabras sueltas de Francisco, que podrían ser interpretados como un intento de quebrar el bloqueo interno castrista, quedaron anulados por la horrorosa visita de Francisco al ex dictador Fidel Castro, solicitada por la Santa Sede. A juzgar por las fotos difundidas por el periódico Granma, Francisco contemplaba al sanguinario ex dictador y estrechaba sus manos como si fuese un santo, y no el hombre responsable por el fusilamiento de jóvenes mártires católicos que murieron en el “paredón” exclamando “ ¡Viva Cristo Rey, abajo el comunismo!”; el artífice de la posterior estrategia de crear apóstatas y no mártires, reconocida en discurso en la Universidad de La Habana; el mayor responsable, en fin, de la destrucción de Cuba. En esa perspectiva, este viaje papal a Cuba contribuyó decisivamente a mantener el bloqueo interno que asfixia a los cubanos, y a empujar a los católicos cubanos a una “reconciliación” con los Lobos comunistas. Son estas algunas primeras reflexiones, sin duda esquemáticas, en momentos en que acaba de terminar la visita de Francisco a la isla-cárcel de Cuba. Juan Habanero Cubano, 21 de septiembre de 2015.
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