|
Nota |
|
CULTURA
: 10/10/2013
|
|
|
|
Malala Yousufzai, la niña paquistaní baleada por defender el derecho de las mujeres a la educación, recibió el premio Sajarov por su lucha en favor de las niñas paquistaníes. El año pasado sufrió un atentado de los talibanes.
|
|
|
Malala Yousufzai, la joven activista de la escolarización femenina baleada por talibanes en Pakistán en octubre del año pasado, fue galardonada con el premio Sajarov para la Libertad de Conciencia que otorga el Parlamento Europeo.
La distinción de 50.000 euros, por la que también fue nominado el ex agente de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense Edward Snowden, es considerada la más importante de Europa en materia de derechos humanos.
Malala, de 16 años de edad, se hizo conocida por su defensa del derecho a la educación de las niñas paquistaníes y por su denuncia de la represión talibán en el valle del Swat.
Como parte de su campaña, en 2009 empezó a escribir en un blog de la cadena británica BBC, bajo el pseudónimo de Gul Makai, abogando por la libertad de educación para las mujeres.
Por esa época los talibanes y los intensos combates en la región dejaron a muchos niños, y especialmente niñas, sin la posibilidad de ir a la escuela.
El reconocimiento a su lucha, ya con su nombre real, llegó por un documental sobre su vida filmado por el New York Times, al que le sucedieron varias entrevistas con medios internacionales.
Esa fama, junto a comentarios considerados provocadores por los talibanes, como haber explicitado su admiración por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le hizo ganar más enemigos que amigos en la conflictiva región.
El 9 de octubre del 2012 fue atacada por dos extremistas islámicos cuando regresaba a su casa en la localidad de Mingora, en el norteño valle de Swat paquistaní.
Los talibanes le realizaron un disparo a quemarropa en la cabeza cuando la niña se encontraba en el autobús que la traía de su escuela.
Primero fue intervenida en Pakistán, donde se le extrajo la bala que había ingresado debajo de uno de sus ojos, y luego fue trasladada al Reino Unido donde le realizaron varias cirugías y continuó con su recuperación.
Actualmente adoptó como segundo hogar la ciudad de Birmingham, en el centro de Inglaterra, lugar al que también se trasladó toda su familia, pero siempre manifestó su deseo de volver a Pakistán para continuar con su labor humanitaria a través de la política.
Por ser considerada como un ejemplo, el Parlamento Europeo le otorgó hoy el premio Sajarov que es entregado cada año en memoria del físico y disidente soviético Andrei Sajarov.
Entre la lista de ganadores está el ex presidente sudafricano Nelson Mandela y la líder opositora birmana, Aung San Suu Kyi, quien a fines de este mes recogerá el galardón que se le concedió en 1990 y que entonces no pudo recibir por estar bajo arresto domiciliario.
No es la primera distinción para Malala, también mencionada entre las favoritas para el premio Nobel de la Paz que se anunciará mañana.
En julio de este año, en coincidencia con su cumpleaños número 16, fue homenajeada por las Naciones Unidas que la consideró “la niña más valiente del mundo”.
“Cincuenta y siete millones de niños no van a la escuela. La mayoría son niñas. En los momentos en que debemos aumentar nuestros esfuerzos, disminuye la ayuda internacional para la educación”, dijo en ese momento el titular del organismo, Ban Ki-moon.
“Creyeron que la bala nos callaría, pero fallaron, y en vez del silencio se originaron miles de voces”, señaló por su parte la joven, ya un ícono mundial de la educación femenina.
|
|
|